A la búsqueda de una solución inteligente con la que gestionar un negocio, las compañías se adentran en el complejo entramado de la elección de un ERP que responda a las necesidades que se les plantean. Una hazaña que no es baladí, ya que la adopción de una solución incorrecta puede acabar enterrando el propio negocio. El problema es que no se percatarán hasta que éste explota sin avisar.
Según diversos estudios internacionales, menos de la mitad de las compañías que adoptan un nuevo ERP consiguen desarrollar una estrategia de negocio exitosa gracias a la herramienta elegida. Eso sí, aquel porcentaje de casos satisfactorios comenzó a notar el cambio desde el primer momento. Y es que el problema de que un ERP salga adelante perfectamente conectado a la empresa no depende tanto de la competencia de sus responsables, sino de elecciones iniciales que se han tomado.
La primera decisión equivocada llega en el momento de la elección del software. Una gran parte de las empresas comienzan con un mal planteamiento en su búsqueda de un ERP, ya que intentan encajar el negocio en la aplicación en sí, cuando realmente es necesario conocer el partido que ofrece el software para acoplarlo a la propia estrategia. Eligiendo el software que mejor se adapte y, flexibilizando el negocio en sí, la implementación será más satisfactoria.
Sin embargo, a menudo el ERP es elegido por tres motivos que acaban desencadenando en una consecución de errores:
- El CFO, CEO o responsable similar ya utilizó un software determinado en otra compañía y, como está habituado a su uso, pretende reutilizarlo en la nueva empresa.
- La elección puramente económica. Utilizar un ERP u otro se elige por el precio cerrado del software sin importar si realmente se adecua a nuestras necesidades.
- Otra compañía del grupo ya utiliza el ERP y pensamos que, si a ellos les funciona, ¿por qué no a nosotros? Incluso cuando el modelo es completamente diferente.
Aspectos que, aunque a simple lectura puedan parecernos ilógicos, aún permanecen muy asentados en algunas compañías.
En AXAZURE nos preocupamos en estudiar cada negocio de forma personalizada para poder entender si efectivamente AX es el ERP que mejor se adapta a sus necesidades. Una vez mostrada (ya sea a través de nuestra plataforma de e-learning o bien a través de demos de producto más específicas) y entendida, analizamos con el cliente cómo AX se integrará en su estrategia para alcanzar el éxito.